Probablemente maneje materiales inflamables en su hogar o lugar de trabajo todos los días sin siquiera saberlo. Los materiales inflamables son simplemente cualquier material que pueda incendiarse o encenderse fácilmente. Existen diferentes tipos de materiales inflamables:
- Líquido: ciertos líquidos producen vapores que, cuando se mezclan con el aire, pueden encenderse. La gasolina, el alcohol, el disolvente, la acetona y la laca se consideran líquidos inflamables. La pintura, el queroseno y el combustible diesel son ejemplos de líquidos combustibles. La única diferencia entre un líquido que es inflamable y uno que es combustible es la temperatura a la que el líquido se encenderá.
- Sólido: cualquier cosa hecha de papel, fibras como ropa, ropa de cama y trapos, madera y productos de madera, fuegos artificiales, pólvora, metales pirofóricos (estos se encienden al entrar en contacto con el aire como metales de sodio y potasio) y otros artículos que están empapados en líquidos inflamables.
- Gas: ejemplos son butano, propano, metano y acetileno.
A continuación se ofrecen algunos consejos para manipular materiales inflamables de forma segura:
- Tenga siempre a mano un extintor de incendios que funcione.
- Infórmese de los peligros que plantean los diferentes materiales inflamables con los que trabaja. Siempre lea las advertencias publicadas en las etiquetas de los productos de limpieza, latas de pintura, botellas de alcohol, cajas de fósforos y otros. Sepa qué hacer cuando entre en contacto con estos materiales.
- Almacene todos los materiales inflamables, especialmente los líquidos, lejos de la luz solar y fuentes de calor. Asegúrese de mantenerlos en sus contenedores de almacenamiento originales. Si necesita transferir los materiales, etiquételos correctamente. En casa, colóquelos en el armario de almacenamiento con llave adecuado.
- Si maneja una gran cantidad de productos químicos en su línea de trabajo, su empresa debe tener un edificio de almacenamiento de productos químicos o líquidos inflamables separado para materiales peligrosos. Asegúrese de saber dónde se encuentra.
- Compruebe siempre que los contenedores no presenten signos de corrosión o daños, ya que esto puede provocar la filtración de mercancías peligrosas.
- Nunca almacene soluciones ácidas y básicas cerca y alrededor de la otra. Las bases como el hidróxido de amonio y el hidróxido de sodio se encuentran en productos de limpieza comunes. Algunos productos de limpieza también contienen ácidos. Ejemplos de soluciones ácidas son ácido sulfúrico, ácido acético y ácido clorhídrico. Estos dos tipos de sustancias son incompatibles. Cuando entran en contacto entre sí, pueden provocar una explosión o producir humos tóxicos.
- Mantenga los materiales inflamables alejados de las fuentes de ignición ya que sus vapores pueden encenderse. Algunas fuentes de ignición incluyen interruptores o enchufes eléctricos, fósforos, encendedores, etc.
- Cuando trabaje con líquidos inflamables, use solo la cantidad que necesite y almacene adecuadamente el resto inmediatamente en recipientes sellados. Asegúrese de que su área de trabajo esté bien ventilada. Los humos de estos materiales son venenosos; Si se siente débil o mareado, salga al aire libre para tomar un poco de aire fresco.
- Utilice únicamente las herramientas / equipos adecuados para manipular materiales inflamables. Esto incluye el uso de equipo de protección (guantes, gafas y similares).
- Deseche adecuadamente los materiales que estuvieron en contacto con productos inflamables. Estos incluyen latas de gasolina, pintura y disolventes, contenedores de productos químicos, trapos de limpieza y otros. La eliminación de productos químicos y líquidos inflamables siempre debe cumplir con las normas de seguridad establecidas por el gobierno.
- Coloque una lista de números de emergencia (911, el departamento de bomberos, el centro de control de intoxicaciones y su hospital local) cerca del teléfono.
Hay muchos materiales inflamables que se encuentran en casas y edificios. Debido a que son tan comunes, la gente tiende a olvidar los peligros de usarlos incorrectamente. Saber cómo almacenar y manipular correctamente estos materiales puede salvar propiedades y vidas.